La provincia septentrional china de Hebei cerrará 2.500 hornos de ladrillos y tejas sólidas en un a?o en el marco de una campa?a para frenar la contaminación que afecta a una vasta región del norte del país, según funcionarios locales.
Las administraciones gubernamentales desmantelaron el jueves el primer grupo de 62 hornos distribuidos en 11 ciudades, con lo que se espera ahorrar 90.000 toneladas de carbón y reducir 11.000 toneladas anuales de emisiones de polvos, dióxido de azufre y óxido de nitrógeno.
El cierre de los hornos forma parte de las medidas que Hebei está aplicando para reducir el consumo del carbón y la contaminación. Los nuevos materiales de construcción, tales como ladrillos con huecos sustituirán a los ladrillos sólidos que se usaban antes.
Los hornos de ladrillos sólidos despilfarran recursos, destruyen tierras de cultivo y contaminan gravemente por sus emisiones directas, aseguró un funcionario provincial.
Las 2.500 fábricas de ladrillos y tejas sólidas en Hebei producen 12.000 millones de ladrillos al a?o, pero consumen 2,2 millones de toneladas de carbón y vierten 250.000 toneladas de contaminantes.
Hebei, que limita con Beijing y la municipalidad costera septentrional de Tianjin, ha sido objeto de constantes críticas porque sus pesadas industrias han provocado una grave contaminación, especialmente esmog, que ha afectado a sus regiones circundantes.
Las autoridades de la provincia están adoptando medidas para limitar su excesivo número de acerías, plantas de vidrio y hormigón para reducir su polución.
En 2014, Hebei redujo el consumo de carbón en 15 millones de toneladas, la primera vez que el consumo de carbón ha bajado respecto al a?o anterior.
Hasta 2017, Beijing, Tianjin y Hebei verán reducido el consumo de carbón en 13, 10 y 40 millones de toneladas, respectivamente, con respecto a su consumo en 2012, apuntó la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.