Mulan Weichang, prado de caza imperial que cuenta con árboles frondosos, ríos y animales, queda a 400 kilómetros de Beijing. Allí se encuentra el Rancho Mecánico de Silvicultura Saihanba de la provincia de Hebei.
Durante el segundo a?o del emperador Tongzhi de la dinastía Qing (1863), debido al debilitamiento del poderío imperial, comenzó por primera vez la tala a gran escala en Mulan Weichang para equilibrar la balanza financiera. Desde aquel entonces y hasta el a?o 1916, en un lapso de 53 a?os, más de 1.300.000 mu de bosques han sido talados. A la caída de la dinastía Qing, los bosques primitivos, prados y ríos se habían convertido en planadas y terrenos arenisco por la tala excesiva.
En 1961, el entonces Ministerio de Silvicultura envió personal a Saihanba a llevar a cabo estudios de planificación de forestación artificial. En febrero de 1962, se fundó el Rancho Mecánico de Silvicultura Saihanba de Chengde del Ministerio de Silvicultura de China, lo cual significó el inicio de la convivencia entre el ser humano y la naturaleza en Saihanba.
Al principio de la fundación del rancho, el Ministerio de Silvicultura convocó a 369 personas, entre las cuales 127 eran graduados de 24 universidades y colegios de 18 provincias, y otros funcionarios y empleados locales.
En invierno, la temperatura de Saihanba puede llegar a 40 grados bajo cero. La nieve la bloquea del mundo exterior y el transporte se reduce a caballos y vacas. Un recorrido de 100 kilómetros puede tomar entre dos o tres días. En aquel entonces, “primero la producción, después la vida” era el eslogan de la construcción socialista y es así en Saihanba.
En el a?o 1982, los árboles de Saihanba se transformaron en bosques, sin embargo, la mejora en el nivel de vida y de educación son recientes.
La ciencia y la tecnología han sido un apoyo importante para la recuperación de las condiciones naturales de Saihanba. Desde la etapa de experimental en 1962, los técnicos clave ya habían conseguido logros importantes en la innovación tecnológica y en el cultivo de especie de árboles: Criar plantones resistentes al frío y al viento arenoso y perfeccionar las maquinarias para promover la calidad y la velocidad de la construcción de bosque. Hasta el a?o 1964, el índice de supervivencia de los 156 mu de alerce fue mayor al 90%, mucho más alto que el 8% de hacía dos a?os.
Desde la perspicacia y el valor para mejorar el medio ambiente de la primera generación de dirigencia del Partido Comunista de China hasta el concepto de desarrollo verde del presidente Xi Jinping, quien propone que la construcción de la civilización ecológica es un plan a largo plazo relacionado con el bienestar del pueblo y el futuro de la nación, la convivencia entre el ser humano y la naturaleza ha sido un consenso y un destino.
La naturaleza también corresponde al ser humano si este le da un buen tratamiento. Desde 1962 hasta finales de 2016, la superficie del bosque de Saihanba ha aumentado de 240.000 mu a 1.120.000 mu, el porcentaje de cobertura forestal del 18% al 80%, y la reserva forestal total de 330 m3 a 10.120.000 m3.
El periodo libre de escarcha de Saihanba ha incrementado pasando de 52 días a 64 y los días promedio anuales con grandes vientos se han reducido de 83 a 53. En los a?os 50 del siglo pasado, los días promedio anuales con viento arenoso eran 56,2, pero en a?os recientes, los días con viento arenoso en la primavera de Beijing se han reducido un 70%.
Las actividades de forestación de gran escala también han creado numerosas plazas de trabajo e impulsado el desarrollo del sector turístico, ganadero, productos de monta?a, artesanal y transporte, lo cual ha aumentado en 600 millones de yuanes los ingresos anuales de los habitantes locales, siendo este un nuevo camino parasalir de la pobreza y alcanzar la prosperidad.
Estas cifras son la mejore prueba de la convivencia entre el ser humano y la naturaleza.