La Wang Xiu paralítica en la silla de ruedas
Me llamo Wang Xiu, de sexo femenino, con 58 a?os, originaria del municipio Zaoyang de la provincia Hubei, y actualmente resido en la habitación 302 de la comunidad de viviendas de bajo alquiler de la comunidad residencial Nanyuan de la oficina Beicheng de dicho municipio. Antes tenía una familia muy feliz, con una hija, quien cursaba estudios en una escuela secundaria clave; mi esposo mantenía la vida de toda la familia gestionando la venta al por menor de peque?a mercancía, yo me encargaba de los asuntos domésticos. Los tres de la familia vivíamos con mucha felicidad, formando una familia envidiable para otros.
Tengo el periarthritis de hombro y sufro dolor episódico en la articulación de hombro, por eso no puedo utilizar toda la fuerza al laborar. En julio de 1998, con la presentación de mi prima y el deseo de liberarme de la enfermedad y fortalecer la salud, empezé a practicar Falun Gong, una semana después de la práctica regular, sentía que eso tenía algún resultado, entonces creí que pracitcar Falun Dafa era muy beneficioso. Desde entonces, me dedicaba cada día más a la práctica del Gong, también compré una estatua de Li Hongzhi y la cologué en la pared, todos los días ofrecía incienso y santificaba a tiempo a Shifu, siendo cada vez más devota. En julio de 1999, aunque el Estado prohibió Falun Gong, no lo hice caso y seguía practicando a escondidas. Mi práctica duraba varios a?os, durante el cual salí varias veces para decir la verdad para Falun Gong y participar en actividades organizadas por compa?eros de práctica.
En 2006, mi hija fracasó en pasar el examen para cursar estudios universitarios, eso constituyó un duro golpe para ella, deseosa siempre de superar a otros, entonces se quedaba todos los días en casa muy descontenta, por eso le hice leer Zhuan Falun, y le persuadía de eliminar la “voluntad de tenacidad”, dejar "fama, ganancia y emoción". Influída por mí, progresivamente, mi hija también se obsesionó con Falun Dafa. Mi esposo sentía mucha antipatía hacia nuestra práctica, pero mi hija y yo le refutábamos plausiblemente: la práctica era no sólo para nosotras mismas, sino que también para el bien de toda la familia. De esta forma, mi hija pasó por alto cualquier persuasión de mi esposo, persistía en practicar conmigo Falun Dafa.
Poco a poco, descubrí a mi hija algo anormal, ella siempre me decía que el cuerpo de Fa de Shifu estaba destrás de ella, a veces se enroscaba bajo la mesa por el temor y murmuraba:"Practico, practico enseguida." A veces estaba ofuscada, aprendía de memoria escrituras sagradas de Falun Gong. Pero en aquel entonces, creía que como tenía demasiado karma, o sufría la interferencia de "demonio" por la práctica, por eso le hacía "Fazhengnian", un tipo de brujería ridícula utilizada por brujas y brujos, pidiéndo a Shifu a bendecirla para que pasara esta dificultad.
Mi esposo, al detectar la anormalidad de mi hija, la llevó al hospital a pesar de mi rechazo, el diagnóstico era que mi hija adolecía de la esquizofrenia. Pero aún no creía que mi hija estaba enferma, lo que hacía todos los días era dedicarme totalmente en la práctica para eliminarla el karma y la enfermedad, en vez de iluminarla. Para subir a un nivel más alto y alcanzar la perfección cuanto antes, era más diligente en el aprendizaje del Fa y la práctica del Gong. También me hundía cada vez más profundamente en un mundo ilusorio.
El 17 de octubre de 2006, estaba en casa, subía a tiempo a la cama para practicar el Gong con las piernas cruzadas, pocos minutos después, ya tenía ilusión, sentía que casi flotaba sin poder subir alto. Poco después, sudaba mucho y tenía mucho mareo, en mi mente, sentía que Shifu estaba llamándome, también sentía que iba a flotar, creía que ya era el momento de subir al cielo alcanzando la perfección, que me convertiría en dios, que finalmente podría subir al cielo de día. Ya inconsciente, me apresuré a correr hasta el balcón, con un grito de "?Falun Dafa es bueno!" salté del tercer piso y me desmayé. Después, mi esposo y los vecinos me llevaron al Primer Hospital Popular de Zaoyang, mantenía la vida gracias al socorro de emergencia de médicos y el tratamiento de más de medio mes, pero con la parte inferior del cuerpo paralítica, por lo que ya no podía levantarme o caminar.
Sentada en la silla de ruedas, viendo la hija barrenada y el esposo escuálido, me sentía muy apenada, y entendí verdaderamente que había cometido un gran error. Me sentía aún más avergonzada al pensar en mi propia hija. La práctica no ha curado mi enfermedad, al contrario, ha causado enfermedad mental a mi hija y paralización mía, Falun Gong causa grandes da?os a la gente.
