las fotos en el volante
Me llamo Zhu Xiaomei, tengo 51 a?os y soy del pueblo de Jinyunhu de la provincia de Zhejiang. En el enero de presente a?o, fui a la casa de mi prima situada en Junhua. Mi prima me contó que el dios había bajado del cielo, si creía en él lograría felicidad. No hacía falta tomar las medicinas, se curaría la enfermedad sólo con cerrar los ojos y decir " Agradezco el dio todopoderoso, le adoro". Poco a poco, creía en el dios todopoderoso y me adhirí al grupo. Un mes depués, volví de Xianju, mi prima me ayudó a trasladar mi relación desde Xianju hasta Jinyun..
En estos a?os, tenía enfermedad de corazón, algunas veces cuando me dolía gritaba lo que me había contado mi prima, sin embargo me sentía un poco mejor , por lo que creía más en el dios todopoderoso. Sin embargo, una vez, me dolía mucho y no servía para nada gritar. Me esposo me hizo una reserva en el hospital de Huanshan de Shanghai y me forzó al hospital. Sin más remedio, fuimos a Shanghai en el autobús. Al bajar del autobús, encontramos a un pareja que nos acudió y nos preguntó con entusiasmo: "?No son locales? ?Adónde van?" No conocemos bien este lugary les decimos que iríamos al hospital de Huanshan para tratar la enfermedad de corazón.
" Antes yo tenía enfermedad de corazón y el médico me dijo que hacía falta la operación. En aquel entonces tenía mucho miedo. Posteriormente encontramos una farmacia ancestral. Un médico de medicina tradicional me recetó unas hierbas. Inesperadamente se curó la enfermedad. Les llevo a ver este médico."
Pensaba que me operarían, tenía mucho miedo. Sintiendo el entusiasmo de este pareja, se me ocurrió que era el salvador enviado por el dios todopoderosa para ayudarme a alejar de los dolores.
Por mi esposo y yo fueron guiados hasta una tienda de medicinas tradicionales en la que un médico me tomó el pulso y vio mi lengua. Luego me recetó un gran paquete de hierbas que nos costaba 7 mil yuanes. No pensaba tanto, por lo que creía con estas hierbas se curaría la enfermedad. Cogimos la medicinas tradicionales y nos volvimos a Jinyun.
Después de volver a Jinyun, me designaron cada vez más tareas. Me pidieron que propagar el evangelio y cada semana buscaba al menos 5 personas a la secta. Si no encontraron suficiente personas, tenía que distribuir los volantes. No tenía otro remedio que obligar a mi esposo para que me llevara en la bicicleta para otros pueblos. No hice los trabajos en la casa ni cuidada mi nieta.
Unos días antes, los funcionarios del gobierno me persuadieron y me contaron los perjuicios de dios todopoderoso. Poco a poco, desperté y entendí lo que estaba haciendo., de repente tenía una sensación de alivio. Con la medicionas de 7 mil yuanes, no se curó la enfermedad sino se pasó el periodo mejor de tratamiento. También obligó a mi esposo para el evangelio. Los hijos no me hicieron caso incluso mi nieta peque?a me tenía miedo. Soy un reloj y espero que los hermanos que todavía no se despertan se desprendan de la secta de dios todopoderoso. Si cree en él, no tendrá nada buena.